top of page

El derecho a vivir sin miedo


Este mes queremos levantarnos a una sola voz, bajo el mismo pensamiento y a través de mil acciones. Este mes queremos unirnos como mujeres y prevenir injusticias, defender nuestros derechos y conocer nuestra historia.


En Colombia fueron 612 feminicidios a diciembre del 2022 aproximadamente.

A nosotras nos matan desde lo inicios de la sociedad humana, desde que nos pronunciamos proclamado igualdad, desde que quisimos abolir las jerarquías, y comenzamos a construir un mundo a patir de la igualdad.


Nos matan no solo físicamente, sino en cada violación, cada maltrato físico o psicologico, cuando mutilan nuestro clítoris o nos obligan a tener hijos porque es nuestro deber. Nos matan cuando somos acosadas sexualmente en el trabajo, cuando no hay igualdad salarial. Nos matan cuando no podemos acceder a la escuela o universidad, cuando colonizan nuestro cuerpo con discursos de poder.


Si solo hablamos de violencia sexual; se realizaron 15.823 exámenes medico legales contra personas menores de edad, de las cuales el 87,53 % fueron practicadas a niñas y mujeres adolescentes. Hoy te invitamos a ser sorora, a que nos ayudemos entre nosotras, a levantar nuestro puño y luchar por tu nosotras, por tu mamá, hija, hermana, amiga, cuñada, sobrina... porque esta realidad no es lejana porque seguramente, tú, conoces a alguien que haya sufrido de acoso sexual.


Bienvenidas

Este mes le damos voz a la reflexión a Angélica Villa, estudiante de medicina, interés en ginecología y feminista, además una flowfan que quiso compartirnos su sentir:


"Tristemente hemos normalizado la violencia contra las mujeres, nos hemos acostumbrado, y hay quienes, de cara a esta realidad, afirman que están cansados del tema, que hay cuestiones más importantes, pero, ¿qué es más relevante que el derecho a la vida?


Algunos culpan a las mujeres que han sufrido algún tipo de abuso por la ropa que usan, por su nivel socioeconómico, por la pareja que eligieron, por no haber denunciado a tiempo; también están los que creen que ‘’las mujeres son las que manejan el mundo porque mandan en su casa’’, que no existe desigualdad alguna porque podemos estudiar, votar y trabajar. Pero aún más lamentable, es que, en lugar de sorpresas, la indolencia entre mujeres privilegiadas se vea fortalecida reproduciendo la indiferencia frente a esta realidad.

Me duele pensar, que a pesar de que algunas de nosotras accedemos a posibilidades de educación superior, al mundo laboral con un salario digno y quizá nos interesamos por el feminismo, por la independencia emocional y económica, desde adentro (en la academia y en la esfera profesional), la estructura machista, misógina y patriarcal a la que hemos estado expuestas desde pequeñas, sigue operando. Vivimos cotidianamente con el miedo en nuestro cuerpo.

No hay muertes que duelan más o menos, no son más relevantes las muertes de niñas o madres de familia, tampoco priman las muertes que logran ser mediáticas, pues este tipo de etiquetas promueven una atención desigual a los casos. Son vidas valiosas simplemente por su existencia, eran mujeres a secas, y ninguna de nosotras está exenta. Nos están matando.

Escribo esto por dos razones: Primero, porque el acceso a la justicia no debe ser un privilegio, sino un derecho; se requiere que esta justicia sea ágil, diligente, pero, sobre todo, respetuosa con la memoria de las mujeres y el dolor de sus familias. Una justicia que no revictimice, que otorgue garantías de reparación y no repetición. Una justicia que aliente a más mujeres a denunciar y a confiar en las instituciones. Por otro lado, siento que es necesario no olvidar ni desconectarse de la realidad, debemos cuestionarnos, mirar más allá, cultivar un corazón sensible, y honrar con nuestras luchas a las mujeres que no han sido tan afortunadas como nosotras.

Por último, les comparto esta canción llamada ‘’Canción sin miedo’’, de Vivir Quintana con El Palomar, que, con sus potentes voces, me ayuda a no olvidar, que nos queremos vivas."


✨Escrito por: Angélica Villa, estudiante medicina, interés en ginecología y feminista radical.


En Flow nos unimos, nos abrazamos y hacemos comunidad porque nos importas a través de tu cuerpo. "Vivimos cotidianamente con el miedo en nuestro cuerpo” Queremos que vivas sin miedos a conocerte, física y emocionalmente, que descubras tus poderes como mujer y sabemos, sin duda alguna, que con nuestros productos flow puedes empezar a lograrlo.


Te sorprenderás de lo que puedes aprender, por ejemplo, ¿sabías que no es necesario intoxicar tu cuerpo con hormonas? aquellas que van a generar una disrupción endocrina alterando todo tu ciclo biológico, natural, cíclico y fértil porque existen métodos naturales SIN hormonas que son iguales (e incluso más efectivos que las hormonas anticonceptivas) ¿Has escuchado sobre el método del diafragma o el método sintotérmico? o, ¿sabías que la sangre que tienes cuando tomas hormonas realmente es sangrado por abstinencia y no menstruación?


Hoy tú decides sobre tu cuerpo, fertilidad, sexualidad, placer y menstruación.


Vivamos sin miedos, conozcámonos y hagamos comunidad, una llena de mucho Flow. ✨



BIBLIOGRAFÍA:




bottom of page